I
Dios es quien gobierna la creación,
Dios es quien preside toda creación.
Él todo lo creó, todo está bajo Su dirección,
a todos provee y sobre ellos reina.
Esta es la posición de Dios, esto es quien Él es.
Para todos y toda la creación,
Él es el Creador de todo y, de todo, Señor es.
Es la verdad de quien Él es.
En toda la creación Su identidad única es.
Nada creado, en la humanidad o el mundo espiritual,
puede pretender ser Dios o estar en Su posición,
para reemplazar a Dios por cualquier medio o razón.
Sólo un ser, en toda la creación, tiene tal identidad,
tal poder, autoridad, y gobierno sobre la creación.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
II
Dios camina y habita entre Su creación.
Se eleva alto, sobre toda creación.
También se puede rebajar convirtiéndose en hombre mortal,
en hombre de carne y hueso en la humanidad.
A todos conoce cara a cara, comparte gozo y aflicción.
Al mismo tiempo, decide el destino y dirección de todo ser,
y gobierna sobre todas las cosas.
Y aún más, Él está guiando el destino
y la dirección de la humanidad.
Un Dios así es merecedor de toda adoración,
de toda obediencia y ser conocido por todo ser viviente.
No importa de qué raza o color eres,
o qué tipo de ser humano eres,
confia en Dios y síguelo, reveréncialo a Él,
acepta Su dominio y disposición para tu destino.
Para todo ser humano o ser viviente,
esta es la única decisión que tienes que hacer.
Sólo un ser, en toda la creación, tiene tal identidad,
tal poder, autoridad, y gobierno sobre la creación.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
Sólo Él es nuestro único Dios mismo.
De “La Palabra manifestada en carne”
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